Si como película es aburrida, como saga es un despropósito. En la onceava inmersión que tenemos al universo de Harry Potter, descubrimos aspectos fundamentales de su organización política, todo de forma muy conveniente. Y en una obra que va ya por su tercera entrega, no logra deshacerse de su sentimiento de transición a un desenlace medianamente interesante. Vaya desastre.

Podría haber funcionado... Su arranque es interesante, con algunos elementos narrativos que logran que te preguntes si es real lo que estás viendo -algo realmente complicado cuando sabes que estas viendo una película. Sin embargo, llegados a cierto punto, llegan las explicaciones soporíferas y anodinas, aderezadas con escenas de acción que perdieron el encanto casi oriental de las películas originales. El resultado es horrible, inconsistente y banal; y más que un reencuentro, parece que estás siendo testigo del funeral de esas obras que alguna vez despertaron algo en ti.

Esta obra es una maravilla de principio a fin. Es cierto que tiene un tramo lento y complicado a la mitad, pero queda compensado con la delicadeza que rezuma cada fotograma. Wong Kar-Wai es un genio, y esta es una de aquellas obras en las que, gracias a una comunión exquisita de sus elementos, todo funciona de forma milagrosa.

La fórmula Shawn-Ryan se mantiene viva y no muestra síntomas de agotamiento. No es profunda, ni la catalogaría siquiera de "espectacular", pero tiene un ritmo agradable, sabe lo que quiere contar y no tengo la sensación de refrito. Lo mejor: se nota que hay gente a la que le gustan los videojuegos detrás, alejándose del típico cringe que surge cuando los cincuentones se ponen a hablar del tema.

Shyamalan siempre es gratificante, y esta peli no se queda atrás. Aunque durante un gran tramo parece ahondar más en lo escabroso que en las implicaciones emocionales de la historia, cuenta con un par de momentos de gracia y puedes sentir que te está contando algo. Me encontraba de culo con su ritmo, pues es una obra acelerada, pero ciertos momentos me confirman que es otro juego narrativo del autor, así que venga, se lo compro.