Es otra cosa, salvo el nombre de los personajes. No deja títeres con cabeza al relato que se desarrolla en los libros. Se inventan o tergiversan las historias. Ni siquiera la fisonomía de los personajes se acercan a lo que se describen en los libros, salvo honrosas excepciones. No se´como la viuda de Robert Jordan ha permitido este desatino.
Esperé a la segunda temporada por darle una oportunidad, pero ha ido de mal en peor.

Una serie para olvidar, salvo quizás para los que no han leído los libros y les gustan series inconexas y sin sentido. El guion parece escrito por gente a la que le han contado por encima la trama y se han inventado casi todo.