Haz click aquí para copiar la URL
Argentina Argentina · Ciudad autónoma de Buenos Aires
Críticas de Alesztejn
<< 1 4 5 6 7 10 >>
Críticas 47
Críticas ordenadas por utilidad
9
17 de agosto de 2021
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nashville Sounds (The Making of Stars and Stripes) se nos presenta hoy día como una especie de documental de segunda fila dentro de la obra artística de los Beach Boys. Relegado a una tirada en dvd poco difundida en su momento y con la posibilidad de rescatarlo hoy día solo por Youtube, es para mi gusto algo así como un tesoro desapercibido donde es posible hallar hermosas versiones de algunos de las inolvidables canciones de los Beach Boys.

En el año 1996 los Beach Boys se volvieron a reunir luego del prolongado letargo de Brian Wilson (producto en parte por sus problemas con las drogas como así también por su aislamiento de su corta etapa solista) y fueron a grabar un disco en la ciudad de Nashville con varios artistas de la música country, tal vez con la justificada presunción que muchos de sus fans gustaban de este estilo folk típicamente norteamericano e inclusive con el concepto de que el grupo tenía una inconfundible imagen muy estadounidense (acaso hay algo más estadounidense que los Beach Boys?)

Para este plan se reunió a varios artistas country para grabar un álbum tributo al legendario grupo musical californiano pero en este caso los mismos miembros de los BB participan como banda principal y como productores de los artistas country que reversionan algunas de sus canciones más emblemáticas.

El resultado es un interesante disco que consta de nuevas versiones de sus himnos como "Dont Worry Baby" a cargo de Lorrie Morgan, "Sloop John B" con Collin Ray, "Litle Deuce Coupe" con James House o el emblemático y maravilloso "I Get around" con Sawyer Brown por supuesto entre una lista de una docena de canciones más, todas inolvidables.
Lo curioso y maravilloso a la vez es que esta suerte de covers de "canciones viejas" muchas veces suenan tan o mucho más lindas que las originales. La incorporación de nuevas tecnologías que elevan la calidad del sonido, el uso de instrumentos folks que cada vez suenan mejor y el tono intimista de los interpretes las hace sencillamente conmovedoras y muy respetuosas de la personalidad propia de cada cantante.
Además el trabajo audiovisual que documenta las sesiones de grabación del album consta de muchas tomas desde la sala de control alternando el micrófono abierto de los músicos invitados con el coro permanente de los veteranos Mike Love o el mismo Brian Wilson acrecentando muy bien ese clima intimista y logrando lucir aun más ese cancionero tan rico en matices, letras y armonías.

Como dato adicional cabe agregar que el álbum grabado "Stars y Stripes" fue el último que los miembros restantes de la banda grabaron juntos como los Beach Boys, he aquí otro de los valores testimonial de este documental de 1996 muy digno de escucharlo y disfrutarlo entero, de punta a punta.
Alesztejn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
26 de octubre de 2023
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
El filme arranca y cierra con la canción de Charly Garcia “Dos cero uno" (transas) y creo que le queda muy bien. Por un lado, nos cuenta algo acerca de la utopía de los filósofos y las ganas de cambiar el mundo con la palabra y el debate en el campo de las ideas y no tanto con lo fáctico. Y por otro lado, porque en solo 2 minutos la ironía de la letra, el beat de batería y sobre todo cómo le entra al piano Charly nos logra meter de lleno en esa especie de reparto de cartas que es el inicio de la película.

El título hace referencia a la sede en el barrio de Caballito de la Facultad de Filosofía y Letras ("Filo", en la calle Puan 486) La universidad pública con sus debates y su rigurosos programas de estudio, sus espacios cargados de afiches políticos y sus ocasionales interrupciones de clases por anuncios de militantes del centro de estudiantes. Y es en ese universo donde transcurre parte de la acción, cuando el titular de una de las cátedras de Filosofía política fallece en forma súbita. A partir de allí se desata una competencia entre dos docentes por un llamado a concurso para sucederlo. Uno, es el profesor tradicional, compañero de años del ex-jefe de catedra, para el que la facultad es su vida misma y a la cual ha dedicado de lleno a la docencia. El otro, que también reclama para sí el puesto vacante, es más carismático y con personalidad opuesta, incluso llega exitoso de dar clases en universidades europeas, seduce hablando en otros idiomas y hasta es entrador con las mujeres (breve pero eficaz cameo a Lali Espósito).

Se produce entonces un duelo actoral hermoso y entretenido entre ese gran actor que es Leonardo Sbaraglia y el otro menos famoso pero que también se luce que es Marcelo Subiotto. El primero, un pedante en el mejor sentido de la palabra que fascina a la audiencia haciendo constantes citas a Kant y Platón; y el segundo un docente de catedra que alterna sus claustros universitarios con algún programa de filosofía en barrios humildes (muy bien captado por el director) o hasta dando clases privadas en la residencia misma de una ricachona que las paga en dólares pero que no se la ve muy interesada.


Puan es una película que tiene muchos toques de comedia y de humor donde no parece ocurrir ningún conflicto importante durante toda la trama. Sin embargo, no está exenta de momentos de melancolía y de múltiples lecturas. No escatima en dotar al guion con varios pasajes discursivos donde se citan ideas de Heráclito, Hobbes o Rousseau que resultaran interesantes para algunos, pero para otros resultara algo aburrida. Me parece un emprendimiento cinematográfico infrecuente y que, si se tiene alguna idea de lo que se va a ver, como en mi caso, seguramente saldrás de la sala satisfecho y apasionado
Alesztejn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
2 de setiembre de 2021
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Voy a comenzar señalando que esta película de 2012 del director Gabriel Medina la he rescatado de una colección personal de dvds, no de alguna plataforma de streaming, lo cual de algún modo puede resultar para algunos una rareza de hallar dentro de la oferta disponible del cine actual.

El argumento trata acerca de un joven que padece esporádicos ataques de pánico y que llega junto a su padre a una cabaña situada en un entorno serrano y apacible. Al promediar la primera noche, el muchacho es picado por una araña de tamaño considerable y de temible aspecto. A la mañana siguiente, luego de concurrir al hospitalito de la comarca, una enfermera le inyecta corticoides y le explica que no es nada grave. Sin embargo, al poco tiempo el brazo en que fue picado comienza a infectarse notoriamente. Sin perder tiempo, el muchacho acude en busca de la opinión de uno de los habitantes del pueblo que le afirma que la única forma de "zafar" de la muerte es si logra conseguir que lo vuelva a picar otra araña de la misma especie, y eso debe ser rápidamente. De esa manera, bajo la guía de un baqueano alcohólico y ultra religioso comienza una búsqueda incesante por planicies y sierras del escondite donde se refugiarían las arañas.

Esta bastante claro que película tiene buenos elementos desde donde abordarla. Una historia sencilla pero interesante; una envoltura escenográfica notable con buenos paisajes de la provincia argentina de Córdoba; un trío de buenos actores (Martín Piroyansky, Alejandro Awada y Jorge Sesán) y la presencia espeluznante de un insecto que cinematográficamente suele causar repulsión, como ser una araña negra de patas largas y muy peluda.
Además se evidencia que el realizador subraya cierto cariño de las virtudes paisajísticas del entorno serrano donde se desarrolla la película, a juzgar principalmente por los escenarios que este escoge para filmarla. Tal es así que al momento de los créditos finales se destaca la siguiente leyenda “la producción agradece especialmente a la comuna de La Cumbrecita ( provincia de Córdoba) por hacer posible este film"

El problema de la película a mi modo ver es que después de un buen comienzo, promediando ya la mitad del film, comienza a resultar algo aburrida. Sobre todo en las secuencias en que se produce el periplo de exploración de los personajes en medio valles y sierras que se hacen algo largas. Creo que hubiera sido un brillante ejercicio fílmico si se hubiera concebido "la araña Vampiro" como un cuento para un mediometraje. Pero, aun así, a pesar de la extensión, el relato resulta bastante redondo narrativamente hablando, con un buen desarrollo y un inteligente final que por supuesto no voy a espoilear.

"La Araña vampiro" tuvo una gran oportunidad de hacerse ver en el Festival de Cine de Buenos Aires (Bafici 2012) donde obtuvo sus premios como mejor película argentina y otro galardón adicional para el por entonces prometedor protagonista Martin Piroyansky como mejor actor. En el balance, se puede deducir el carácter personal del director en esta ficción argentina y destacar su libertad artística. Hecha con pocos elementos y con un singular deleite por querer narrar una historia abriéndose al paisaje, sabe explorar con convicción la aventura, incluso el terror con ingredientes de western. Lo que suele reconocerse como cine independiente y de género.
Alesztejn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
19 de julio de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Videoclip del tema “Nada que perder” también conocido como “Movida Rastafari”, una canción del grupo argentino Los Pericos incluido en su primer disco llamado El ritual de la banana (1987). En muy poco tiempo esta canción alcanzó un altísimo nivel de popularidad a tal punto que hacia 1988 el mismo álbum, que además contenía hits como “Jamaica reggae” o “El Ritual de la Banana”, resultó el disco más vendido del año.

Con el éxito de la banda y su creciente fama a nivel local comenzaba la sucesión de shows y de giras a lo largo del país. Este primer videoclip del corte “Nada que perder” se lo ve al grupo felizmente paseando en el micro de la banda por alguna autopista del gran Buenos Aires, simulando cantar, corear y tocar los instrumentos mientras transcurre su propia road movie hacia alguna de sus giras.

Una linda muchacha hace dedo, se sube al ómnibus, enciende su walkman y suena la canción que contiene uno de los versos más jodidamente populares y memorables del rock argentino paradójicamente en idioma inglés: “so lonely nights the only way, give me please the chala, let me go away, whoa, yo-yo-yo, whoa yo-yo”, (fumate una chala que esta todo bien, oioioiooo).
La imagen del video se funde en una difusa tonalidad roja verde y amarilla inconfundiblemente rastafari.
Alesztejn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Chocolate: Mayonesa (Vídeo musical)
Vídeo musical
Uruguay2000
3,0
92
7
14 de abril de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Video musical del tema “Mayonesa” (2000) de la banda uruguaya Chocolate y dirigido por David Impelluso. Una de las canciones emblemáticas de la música tropical uruguaya que impactaron rotundamente en fiestas y discotecas en casi toda Latinoamérica durante fines de los 90 y principios de 2000. Se la recuerda inclusive en tándem con “Gelatina” (Nietos del futuro) o “Bicho bicho” (Los Fatales) donde las coreos y las letras pegadizas les jugaron muy a favor haciendo que su popularidad crezca notablemente, por no decir en forma exponencial.


El video de Mayonesa es sencillo y está bastante relacionado con la letra de la canción. Justamente está grabado en una discoteca en la que cuentan la historia de una pareja que se conoce en un boliche en el que hay un joven que se enamora de una chica (“con un tatuaje en la espalda, negra la minifalda, zapatos y el top”) que estaba bailando en la pista y se dio el encuentro cuando ella lo arrastro a la pista a danzar un baile misterioso.

Completa el videoclip lo más importante: una buena coreografía a todo color con pasos de baile grupales eficientemente captados por la cámara, con sus integrantes bailando y moviendo los brazos como batiendo mayonesa y una letra que desde el inicio nos invita a la pista pregonando “haciendo palmas arriba arriba y ese coro que dice, bate que bate, el chocolate”.

El clima fiestero de batucada y candombe persiste de principio a fin en esta recordada cumbia pop. Y aunque hoy día el tema resulte algo pasado de moda, chabacano o naif, sigue siendo de esas clases de canciones que las escuchas y te dan ganas de ponerte a bailar. Y el videoclip sin grandes pretensiones artísticas le hace bastante honor a eso.
Alesztejn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 4 5 6 7 10 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow