No suelo ver películas románticas, o de desamor, porque no es un tema que me interese, pero sí me gusta ver buen cine, y me aventuré a ver este film por la avalancha de nueves y dieces que los/as usuarios/as otorgaban a esta película. "Debe ser la bomba", pensé. "Tendrá un guion espectacular, una historia que te atrapa. Te llegará al corazón y te dejará pillado", murmuré, pues es lo que logra una buena película... quiero decir, una película de 10.
Pero tras verla me quedé decepcionadísimo. Confío mucho en las críticas no profesionales de esta web, pero esta vez me he quedado de piedra. ¿De verdad "esto" se merece pasar del 5? ¿Estamos hablando en serio?
Es lenta, aburrida, sin una trama que te enganche, y para colmo.... ¡no pasa absolutamente nada! Parece que se pusieron a filmar y dijeron "bueno, que salga lo que salga, vamos a ir grabando cosas al tuntún y ya la montaremos".
Es lo más petardo que he visto en años. Deseando que terminara, estaba. Lo único que se salva es la música.
¡Qué pérdida de tiempo más grande! Si valoran su vida y su tiempo, no la vean. No merece la pena.

Me gustan mucho los efectos especiales, pero hombre, un poco de guion tampoco hubiera estado mal. En este caso, no es que no haya, es que además te lo tienes que ir creando tú "pispo", como diría el gran Millán Salcedo, porque son situaciones absurdas una tras otra y sin razón. Es más un videojuego que una película, vas pasando fases a base de matar bichos gigantescos y punto.
Solo destacan los efectos especiales... así que si eso es lo que buscas, enhorabuena. Ahora bien, si los macarrones te gustan con tomate y queso, ni la veas, porque es pasta solamente.

tan bien puntuada estaba que me aventuré a verla, pero ni me emocionó ni me pareció un película de esas que cuando acaba, dices: "joder, qué buena". No la recomendaré ni la veré de nuevo, pero tampoco diré que es mala. Simplemente hay dramas mucho mejor encarrilados, que te tocan la fibra bastante más que esta película, que te sacan hasta una lagrimilla. Esta película la coge Spielberg y te hace llorar.
Chapeaux por los efectos de sonido, que te sumergen en el personaje para que te sientas dentro de él, pero aparte de ese recurso, no le he visto nada destacable. Y el final, un poco simplón. Podían haberle sacado algo más de provecho.
Para los que busquen lo emotivo con una dosis de batería, que vean Whiplash. Eso sí que es un peliculón.

la vi por el gran Christopher Plummer, un actorazo poco valorado, y sin ninguna pretensión más por mi parte. Dadas las poco animosas valoraciones de los críticos, tampoco esperaba mucho más, pero hete aquí que la trama me atrapó desde el principio y me mantuvo pegado al sofá lo que duró el film. Un thriller como hacía tiempo no veía.
Y el final... el final ¡chapeaux! Un gran desenlace para una muy buena película. Sí, señor. Olé para el guionista.
La recomiendo sin duda. Las interpretaciones, correctas, pero lo más contundente, el guion. Y no voy a decir de qué va porque es mejor visionarla sin pistas, como me ocurrió a mí, y el resultado fue excelente. Una gran sorpresa.

Seré breve: no se esperen un guion redondo, ni un mensaje filosófico escondido, ni una fotografía estupenda... pero eso sí, prepárense para reír, porque esta película está hecha para eso. Y les digo algo, me lo he pasado fenomenal viéndola.
Hacía tiempo que no me reía tanto con una comedia española. Me río yo de bodrios como "García y García", con más pompa y boato que este film, y no le llega a Canallas ni a la suela de los zapatos.
Agradecido estoy a Guzmán por este regalo que nos ha dado, porque cuántas películas he visto supuestamente de humor y apenas me he reído... Sin embargo, con Canallas la risa es continua.
Es cierto que a veces no se entiende bien lo que dice el "empresario", pero lo compensa el resultado final: una sonrisa de oreja a oreja.
Zafia, burda, soez, atropellada... he leído por internet sobre esta película. ¿Pero saben lo que les digo? Que a mí me ha cambiado el ánimo, me ha hecho reír, olvidarme de los problemas del día a día, hacerme feliz por una hora y media... Y eso para mí no tiene precio.
Bravo, Guzmán. Gracias por esta alocada y divertida historia.