Es el mismo juego de Shrek. Es entretenida aunque ya no sorprende y se me está olvidando con rapidez. Sin grandes gags, la vi a gusto, sin entusiasmo pero vale si no sabes que hacer con las crías y quieres meterte a ver otra.

La película repite un poco el esquema de "Antes del amanecer", y de su secuela "Antes del atardecer", en cuanto trata de una pareja que visita una ciudad durante un breve espacio de tiempo. Sin embargo, si aquellas eran películas románticas esta se decanta claramente por la comedia ácida en torno al choque de culturas entre franceses y americanos. Tiene golpes muy buenos, y el estilo de dirección de Julie Delpy es ágil y con ritmo. La mayor pega que le pongo es que el chico americano se parece demasiado a los personajes neuróticos e hipocondríacos que suele interpretar Woody Allen, pero claro, sin llegarle a la altura. Lo mejor de la película son los dos actores que interpretan a los padres de Julie Delpy, que son sus propios padres en la vida real. Resultan desternillantes.

La nueva película de estas tortugas no tiene nada que ver con las películas de los 90. No han utilizado aquellos disfraces tan cutres de espuma, ahora las tortugas han sido creadas por ordenador y el resultado es una película de animación con efectos increíbles. Es una peli más oscura y con mucha más acción que las anteriores, pero sigue siendo una película para toda la familia. El argumento es fácil de adivinar, la ciudad de Nueva York está en peligro y las tortugas tienen que salvarla. El problema es que al principio de la peli, estos cuatro hermanos están divididos y tendrán que hacer las paces para volver a luchar a juntos. Es entretenida, pero le falta algo de chispa y una historia un poco menos predecible.

Es idealista, pequeña, dando importancia a las cosas que no son el dinero. No está mal, pero anda corta de recursos y no consigue llegar de una buena idea a desarrollar una buena peli. Estreno pequeño que se escapa por los intérpretes muy justitos.

Tiene una frescura sorprendente que demuestra que la edad no tiene porque parar a un director de cine. Puede hacerse un poco larga. El personaje del soldado indio es el que muestra la historia más amarga.
La segunda parte (después del regreso a USA) es la que más me gustó porque tiene mucha profundidad en los personajes, sin ser facilona con las emociones, pero consiguiendo emocionar.