Policía al que matan a su compañero y busca venganza, encerrar a los responsables.

El guión llevado a la pantalla es muy sencillo, estamos en el cambio del oeste a la gran ciudad para John Wayne hace un papel aprobado ramplón. No creo que Wayne hiciera una mala actuación, creo que no le pegaba ese papel, ya con 67 años que tenía en la película no estaba como interpretar persecuciones, tiroteos, peleas y encima representar en la película que era el policía al que todos respetaban y tenían miedo los malos y acabar con el crimen organizado de la ciudad él solito.

La película gira entorno a John Wayne, por lo que para parecer el policía más duro, los secundarios encargados de hacer de malos son también un poco de chiste recordándome a los malos de las películas de Bud Spencer y Terence Hill.