"No soy un hombre fácil" es una ¿comedia? francesa que sigue a un hombre machista que se enfrenta a un mundo donde los roles de género están invertidos, proporcionando una visión satírica donde se exploran temas como el sexismo, la discriminación de género y la lucha por la igualdad.
Considero que la crítica es interesante, pero es una película sin ritmo, sin gracia... sólo preocupada en remarcar los estereotipos de una sociedad machista. Además, creo que se comete un error al masculinizar a las mujeres en su rol de poder (las caracterizan con trajes, corbatas, zapatos...). Acaso no se podría haber resaltado el empoderamiento de manera natural? Una mujer con zapatos de tacón o falda no podría ejercer cargos de alta responsabilidad?
Por otra parte, sucede lo contrario con los hombres que aparecen en la película desarrollando puestos de trabajo menos cualificados (como asistente, limpiador de cristales, etc.). Estos hombres son, en su mayoría, son caracterizados como gays. Y vuelvo a lanzar la pregunta: un hombre hetero no puede ejercer de limpiador o asistente?
Está claro que en las comedias se utiliza la exageración para transmitir sus mensajes, en este caso, sobre la desigualdad de género y los roles sociales, pero a mi parecer, me parece incluso demasiado forzado.