Lo que nos ofrece ‘La fiesta de las salchichas’ es una total y absoluta sátira de las religiones y creencias. Todo ello en un entorno alimenticio sexualizado a la enésima potencia y en una transitar repleto de alimentos que son estereotipos humanos ridiculizados al máximo: los tacos mexicanos, el aguardiente indio… Nadie se libra aquí de que le caiga un chiste encima...

Ahora bien, el planteamiento anterior se podía haber hecho de muchas y divertidas maneras, y todas ellas no exentas de madurez, elegancia y buen gusto unido a la parodia, inclusive también en la animación adulta. En lugar de eso, todo el equipo de este film ha optado por la chabacanería, el sexo y por un lenguaje totalmente irreverente y soez que termina por “taladrar” los oídos con la excesiva repetición de palabras de mal gusto... Todo ello con el supuesto disfraz de la gran crítica a las creencias y con algún que otro supuesto “gag” de contenido muy fuerte y fuera totalmente de tono y de lugar, incluso en una comedia gamberra como esta. Nuevamente surge la gran pregunta: ¿Vale todo en el humor?

Por otro lado, también resulta desapacible y desolador que los guionistas identifiquen casi todo el humor adulto en torno a lo sexual, es como reducir el humor infantil a “caca, culo, pedo y pis”. En fin, que una idea bastante original, bizarra y surrealista se desaprovecha en sus primeros 10-15 minutos cuando te das cuenta que el tema no da para más… es como contar el mismo chiste cien veces, al principio hace gracia, luego ya no tanto y al final hasta irrita…

En definitiva: Esta es una cinta que quiere ser tan extremadamente gamberra e irreverente que termina por volverse cansina. De esta forma, tira por la borda todo su original planteamiento inicial hasta desembocar en un inenarrable e indescriptible clímax final…

-Lo mejor: El doblaje original, con mención especial al trabajo de Salma Hayek. El personaje de Frank, la salchicha. La animación que resulta muy curiosa. El terrible momento de la caída del carrito. Algún cinéfilo gag.

-Lo peor: Una gran idea desperdiciada en la más absoluta y total chabacanería (aún conociendo ya de antemano a los autores). Cierto “gag” que sobra de manera muy clara y que sólo puede ser fruto de una mente perjudicada. ¿Cuatro guionistas para reducirlo todo o casi todo al sexo y al lenguaje soez?

-Más en: www.cineycine.com