Hay películas para entretenerse, para reir, para llorar, para pasar un buen rato o para pasarlo malo, para olvidar el día, la semana o incluso el mes, para desconectar, para imaginar, para soñar... Para lo que sea menos para pensar.
En fin, que sí, que bastante tenemos con lo que tenemos como para ir al cine a ver realidad social; lo respeto y, en ocasiones, hasta lo comparto.

Esta, en cambio es de esas, de las de pensar y mucho; de esas en las que algunos dicen que no pasa nada pero para mi, que soy un bicho raro, pasa todo. Una de esas peliculas que me encantan, no porque me parezca buena o me deje de parecer mala, que también, ni porque me guste la historia, porque de hecho me horroriza y bajo ningún concepto me gustaría verme en el pellejo de ninguno de los personajes. Me gusta porque me la creo, porque es pura realidad hasta el punto de no tener banda sonora ni en los créditos. Me gusta porque acaba y pienso, del verbo pensar, ese verbo que duele más que el verbo doler y que nuestros representantes acabarán borrando del diccionario de la RAE. Me gusta porque refleja lo que vemos día a día en los periódicos: político y/o banquero y/o empresario, en este caso, se lava las manos y pone entre la espada y la pared a esa persona normal y corriente, como tu y como yo, ni más bueno, ni más malo, simplemente alguien que se levanta para ganarse la vida, alienado, cama, curro, ocio (o no), casa, cama. Esa persona que tiene que decidir entre egoísmo o solidaridad y que, simplemente, no quiere. Me gusta porque refleja como es la sociedad y como somos las personas. Me gusta porque genera debate, el debate nuestro de cada día; el debate interno entre ser un queda bien o simplemente ser, el debate entre lo que me gustaría que me saliese hacer, pero no me sale, y lo que realmente quiero hacer, aunque querría no querer hacerlo. Me gusta porque me olvido de las imágenes, de cómo trabajan los actores, de cómo es el doblaje o de si el guión es más o menos bueno, simplemente observo y abro los ojos, aunque volver a cerrarlos me resulta mucho más cómodo.