Sin duda, uno de los eventos cinematográficos más curiosos y poco esperados del año anterior fue el rotundo éxito de esta película animada sobre el arácnido personaje de Marvel, público y crítica se han unido para elevarla como una de las mejores películas del 2018, más allá de solo pensarla dentro del género de superhéroes, -ya hasta la coronilla de ellas-, sino incluso hablando en términos generales.

Hay que empezar por ubicar a este Spider-Man dentro de un universo en particular, el que fue creado por Sam Raimi entre los años 2002 y 2007, donde por cierto la forma de ubicar al espectador en ese universo es deslumbrante y atractiva, como mucho de lo que se verá a lo largo del metraje.

Entonces, inmediatamente hay que dejar de lado las películas “The Amazing” de Marc Webb (2012-2014), que ya por sí solas son bastante olvidables, e incluso hasta las “Home” de Jon Watts (2017-2019) que pareciera que para lo único que sirven es para meter al personaje a la afamada saga de Avengers.

Entonces Into the Spider-Verse se ambienta en ese universo, pero no es Peter Parker su protagonista, sino es Miles Morales (voz de Shameik Moore), un adolescente que asiste a la secundaria de ascendencia afro-latina quien, como se ha contado en reiteradas ocasiones, sufre la picadura de una araña y adquiere súper poderes.

El Spider-Man de ese universo muere a manos de Wilson Fisk (Liev Schreiber), quien ha construido una gigantesca maquina capaz de alterar las dimensiones paralelas, buscando de esta forma traer desde alguno de estos universos a su esposa e hijo quienes fallecieron en el suyo. Como es de esperarse el plan no sale como lo pensado y más bien comienzan a emerger una serie de arácnidos de otros universos, que tendrán que juntarse con Miles para volver a donde pertenecen y para derrotar a Fisk.

Into the Spider-Verse se solventa gracias a un gran guion escrito por Phil Lord y Rodney Rothman, una historia profunda que apela al divertimiento, a la emoción y a la acción por partes iguales, logrando amalgamarlas a la perfección, la trama no se pierde en ningún momento a pesar de los muchos personajes que aparecen, por el contrario, estos dentro de la lucha que realizan se acuerpan a la perfección tal cual como algo orgánico.

Sin duda un gran filme, entretenido y cautivante, con animación de primer nivel, musicalmente muy bien acompañada, un espectáculo visual pero también argumental, que deja al espectador conocer estos personajes no tan explorados pero que sin duda, son de muchísimo interés, cada quien dotado de una personalidad única.