Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Shelby:
5
Comedia Tras el éxito mundial de Borat, Sacha Baron Cohen interpreta a un reportero gay, con cierta obsesión por la moda y por el culto al cuerpo. Esto le llevará a parodiar a los diseñadores de alta costura y modelos. (FILMAFFINITY)
11 de julio de 2009
39 de 44 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando un actor (particularmente cómico) alcanza la popularidad con un personaje, corre el riesgo evidente de quedarse encasillado en él y malgastarse para satisfacer lo que le piden las masas. En el caso del controvertido Sacha Baron Cohen, su talento para la comedia se ha asociado básicamente a dos: Ali G, bastante dudoso, y el infalible Borat que nos regaló la que puedo considerar una de las mejores comedias de la década. Ahora llega a las pantallas el tercero de su show televisivo, un centroeuropeo frívolo a más no poder cuyo salto al cine podemos considerar algo irregular aunque no del todo desafortunado.

Estamos ante un esquema calcado al de Borat: un film breve en el que el protagonista viaja a América con un objetivo que cumplir, y dando un repaso supuestamente representativo a su sociedad. Pero desgraciadamente los dardos de Brüno no tienen tanto alcance, y demasiado a menudo se pierde en gags escatológicos que apelan a un sentido del humor simplón y cuya eficacia va ligada directamente a la tolerancia del espectador. Por fortuna, esto queda compensado y hasta eclipsado por escenas antológicas como el viaje a Oriente Medio (la mejor parte), el final de la batalla en el ring o el peculiar uso que se da a los mexicanos; además de algunas alusiones a ciertas celebridades y al mundo de la moda (aunque para crítica de eso, ya tenemos por ejemplo a Zoolander).

"Brüno", en fin, sirve sobradamente para pasar un buen rato aunque la provocación suena ya en ocasiones a vista y demasiado forzada, pese a dar también buena cuenta de que esta fórmula debe evolucionar si en el futuro quiere seguir funcionando. Y para los que no disfrutaron con Borat, su visionado es tan recomendable como el de un Éibar-Albacete para los profanos del fútbol.
Shelby
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow