Hubo unas declaraciones de Carlos Vermut que me dejaron entre trastornado y patidifuso. Vermut dijo, acerca de “Magical girl”, que era una mezcla entre el cine de Quentin Tarantino y Pedro Almodóvar. (¿?) Yo no di credito a dichas declaraciones, las asocie más al subidón provocado por el inesperado éxito de la película en diversos festivales. Ahora, una vez vista “Magical girl”, no puedo hacer otra cosa que creer a cierra ojos aquellas palabras del realizador, la cinta es la perfecta mezcla entre el cine del director manchego y el del de Tennessee. ¿Era posible juntar esos dos conceptos tan opuestos?... ¡Si!, y Carlos Vermut lo ha demostrado.
Veo “Magical girl” como el trabajo final de alguien que acaba de terminar segundo de carrera de Quentin Tarantino. Queda patente que Vermut ama el cine de este y que se ha visto varias veces “Pulp fiction” (1994). En ese aspecto el director español no ha demostrado excesiva originalidad ya que “Magical girl” es la versión cañí del segundo largometraje de Tarantino, ¡salvando las distancias, claro! Lo que sí que ha demostrado Vermut es tener las ideas muy claras y valor, ya que para imitar a Quentin hace falta valor. Ha cogido “Pulp fiction” y ha cambiado los personajes y sus situaciones, lo ha adaptado todo a la realidad española que vivimos, y el resultado final es “Magical girl”, un film: interesante, adictivo y resultón.
Otra de las cosas en las que Vermut demuestra ser un clon de Tarantino es: en la utilización de la música a lo largo de la película, el reparto de los creditos iniciales y finales, la utilización de MacGuffins, crear historias independientes que se van entrelazando... Que todo esto no se vea como una critica mía hacia Carlos Vermut, y utilizaré una cita del propio Tarantino para corroborarlo: “Robo de cada película que se ha hecho”. Lo que ha hecho Vermut ha sido adaptar a un genio, y le ha salido estupendamente.
“Magical girl” va sobrada de calidad, eso es indudable. La película refleja la lucha entre lo racional y lo impulsivo, algo que ya comenta uno de los misteriosos personajes que puebla la historia. El film es tan inesperado como rotundo, y tan agradecido como gratificante. Otro de sus puntos fuertes es su reparto, sobrio pero solvente.
En resumidas cuentas, “Magical girl” es un gran logro del cine español, una película muy recomendable y de grato recuerdo que empieza con uno de los inicios más potentes que recuerdo y termina de forma más potente aun todavía.