No es fácil innovar en películas de supervivencia, mas cuando dichas historias ya han sido contadas muchas veces y el reparto se limita como mucho a dos personas, por lo que el/la protagonista debe cargar con todo el peso del film sobre sus hombros.
En "Ártico" esas dos premisas se cumplen a medias. El director Joe Penna deja muchos cabos sueltos en la historia, es una pena no saber quién es ese hombre perdido en el medio del frío del Ártico, que fue a hacer allí, ¿sería un expedicionista o justo el avión cayó en ese lugar? ¿Viajaba solo o había más pasajeros con él? Además, la historia nunca llega a conectar del todo, la trama se torna repetitiva y un sufrimiento constante.
Mads Mikkelsen si cumple y con creces en una interpretación muy exigente, con un enorme sacrificio y esfuerzo físico, soportando esas inhumanas temperaturas bajo cero. Su interpretación es claramente lo mejor del film.