Película que se distingue por su gran creatividad, no obstante estar basada en el concepto de Drácula y los vampiros de Bram Stoker; pero desde sus créditos iniciales se denota su alejamiento de lo convencional y se hace realmente entretenida hasta el fin. Una musicalización realmente admirable, desde lo clasico hasta lo gótico y coral se hace misteriosa y fascinante. La actuación de Jack MacGowran como el profesor Abronsius realmente consagratoria, toda una delicia, digna de mostrarse como ejemplo a futuros actores. Un guión con muy buenos pasajes. Entre un mar de nieve se desenvuelve esta gran parodia de los mitos y paradigmas de ayer y hoy.