Una de las primeras cosas que hago cada mañana es encender la radio para abrir una ventana sonora a lo que pasa en el mundo, Cataluña y Franco están presentes todo el santo día. El bueno de Amenábar, en su séptimo largometraje, nos muestra lo poco que hemos cambiado en ochenta años.

Corre el año 36, la historia gira alrededor de los últimos meses de vida del pensador Miguel de Unamuno: su apoyo inicial al golpe de estado de Franco hasta su famoso incidente con Millán-Astray en el paraninfo de la Universidad de Salamanca.

El director chileno-español nos muestra un capítulo de la historia española de los que no nos han hablado mucho y que los libros de historia han pasado muy por encima. Con gran rigor histórico, muy contenida y con una gran factura técnica, la trama sigue al ilustre Unamuno, alguien que en un principio apoyó a Franco, esperando una tercera República, y que finalmente vio que no iban a arreglar nada; al contrario, iban a crear más dolor y sufrimiento.

Con un gran elenco actoral, quiero destacar por encima de todos al actor vasco Karra Elejalde dando vida a Unamuno, demostrando su valía en un papel de enjundia, cargado de contradicciones. Reseñable es también el papel de Eduard Fernández encarnando al fundador de la Legión Española, que refleja el sinsentido de un personaje dando vivas a la muerte. La música, firmada por el propio director, y el guion son otros dos puntos a favor.

Un interesante episodio de nuestra España que tenemos que conocer y que nos tiene que alertar contra el continuo ascenso del fascismo a nivel mundial que estamos viviendo en nuestros días.

"A veces, permanecer en silencio es mentir, ya que el silencio puede interpretarse como asentimiento."

Sudando Cine