Si uno se pone a sacarle punta a las cosas destroza tanto el libro como la película, la trama es inverosímil, ridícula y pierde cualquier asomo de razón para criticar a la ortodoxia vaticana al llenar la historia de medias verdades y vaguedades. Motivos para criticar al Vaticano hay 100000, aquí quedan diluidos en una apoteosis de fuegos artificiales y aventuras descabelladas.
No se puede tomar en serio, pero entretiene de lo lindo, uno es consciente que esta viendo algo de baja calidad, pero entre los buenos actores, la postal de Roma que ofrece y el ritmo frenético te tragas la película sin rechistar. Uno no puede evitar decir... que mala por dios...
Paso a enumerar algunas dudas razonables sobre la trama...