El desconocido Rob Letterman tomó la gran responsabilidad de llevar la clásica serie de terror llamada Goosebumps al cine, debo confesar que lo hizo muy bien, fue una puta grata sorpresa, cada monstruo me llevaba a mis años de infancia cuando veía religiosamente dicha serie. El mérito de Rob es arriesgarse y contarnos una historia llena de sátira y humor negro, con pocos pero suficientes momentos de terror.

Estoy seguro que R.L. Stine se debe sentir satisfecho de tremendo tributo, tanto así que se río de él mismo, poniéndose como personaje y que Jack Black lo protagonice. Para el recuerdo la escena cuando Jack (R.L. Stine) se encuentra con R.L.Stine (Jack Black) y se saludan, fue algo raro y gracioso a la vez.

En cuanto al elenco, qué puedo decir, estuvo a la altura e hicieron posible una película que estoy seguro pasará a la historia y no es que exagere pero después de Shaun of the Dead no veía una película de sátira que sea tan brillante. Jack Black me dejó callado, estoy seguro que será el papel de su vida. Por otro lado, Dylan Minnette (Zach) y Odeya Rush (Hannah) tuvieron una química estupenda e irreprochable. Ryan Lee (Champ) fue el arma secreta de la película, pero que cague de risa.

Esta película es altamente recomendable si eres un fanático de R.L.Stine y sus creaciones, por Odeya Rush -pero qué rica, por la conchasumadre, me volvería pedófilo por ella-, por Jack Black o por el diabólico muñeco Slappy.