Acabo la película riéndome mucho, porque esto es grande, maravilloso. Buñuel era así, le salían medias películas, ni siquiera cortometrajes. Y esto se puede explicar en lo difícil que es canalizar la emanación de inspiración. En Viridiana vimos dos películas que no tienen nada que ver bajo el nombre de una. Y aquí, el maño no se andó con rodeos, y fruto de su independencia económica (sus amigos), se plantó en ee baile de locos en la gran manzana. Ay Buñuel… si levantaras la cabeza y vieras lo de T5 y otras atrocidades…

Porque sí, es predicar en el desierto querer ir a contracorriente del mundo. Es hablar el idioma de otra persona cuando solo quieres vivir tu vida en paz, no discutir “pues llévatelo”. Las personas que adquieren el conocimiento a través de las armas (los libros), cada vez están más elevadas, y pueden ver desde una perspectiva más óptima la verdad. Y la verdad es que cuando los que piden reciben lo que quieren, continúan siendo necios (manco), que ser cura va contra natura (cura mirando a la moza), que cuanto más puerco, más amas a Dios (clérigo expulsado por limpio) y que Satanás es el enemigo que tú te has buscado.

Me he reído mucho con la vieja desnuda.

Perfecta, salvo que su golpe de inspiración debería haber durado más, por eso me corto de darle un diez.