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Voto de cinemocions:
10
8,2
67.928
Western
Durante la guerra civil norteamericana (1861-1865), tres cazadores de recompensas buscan un tesoro que ninguno de ellos puede encontrar sin la ayuda de los otros dos. Así que colaboran entre sí para conseguir el botín. (FILMAFFINITY)
16 de octubre de 2009
22 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película mítica, sin lugar a dudas, y a la que el paso del tiempo en lugar de desfasarla ha hecho que mejore como los buenos vinos.
Tres personajes clásicos del western unidos en una sola película, el "bueno" de Clint Eastwood con su poncho, su ceja levantada y su cigarro "móvil" en la boca, el feo y "sucio" de Eli Wallach, siempre sin peinar, lavar ni secar y el "malo" de Lee Van Cleef, con su nariz aguileña, su dedo amputado y su mirada entre gélida y burlona. Rubio, Tuco y Sentencia son los nombres que utilizan en la ficción estos tres grandes actores que bordan el papel que se les encomendó en esta película, y Sergio Leone les dirige perfectamente para lograr un film que, a los que tuvimos la suerte de verla en nuestra juventud, nos devuelve por un tiempo a un pasado más o menos lejano en el que ir al cine era una auténcia fiesta, y más a ver películas como esta.
La historia y el guión son muy simples y no tienen secretos, entonces ¿qué diferencia a esta película de todos los espaguetti-westerns de este estilo que se rodaron por aquellos tiempos en Almería y alrededores?, sin lugar a dudas la profesionalidad y la enorme personalidad de sus tres intérpretes principales, la mano maestra de su director y la también ya mítica banda sonora de Ennio Morricone.
La extraña "amistad" entre Rubio y Tuco, ahora somos amigos, ahora no, es uno de los alicientes, mientras que Sentencia deja claro que él no es amigo de nadie en ninguna situación pero siempre está dispuesto a aliarse con el que más le conviene... casi como los políticos de hoy en día.
La escena final, el duelo a tres bandas en el empedrado del cementerio, es un magnífico broche de oro a una historia de tres hombres persiguiendo su jubilación anticipada, un buen montón de dólares que esperan a que alguien, con un par de tiros, se haga con ellos.
En resumen, una película de culto que a muchos les puede resultar sencilla e infantil, pero el que hasta Tarantino sea uno de sus grandes fans no hace sino reforzar el criterio de los que la veneramos.
Tres personajes clásicos del western unidos en una sola película, el "bueno" de Clint Eastwood con su poncho, su ceja levantada y su cigarro "móvil" en la boca, el feo y "sucio" de Eli Wallach, siempre sin peinar, lavar ni secar y el "malo" de Lee Van Cleef, con su nariz aguileña, su dedo amputado y su mirada entre gélida y burlona. Rubio, Tuco y Sentencia son los nombres que utilizan en la ficción estos tres grandes actores que bordan el papel que se les encomendó en esta película, y Sergio Leone les dirige perfectamente para lograr un film que, a los que tuvimos la suerte de verla en nuestra juventud, nos devuelve por un tiempo a un pasado más o menos lejano en el que ir al cine era una auténcia fiesta, y más a ver películas como esta.
La historia y el guión son muy simples y no tienen secretos, entonces ¿qué diferencia a esta película de todos los espaguetti-westerns de este estilo que se rodaron por aquellos tiempos en Almería y alrededores?, sin lugar a dudas la profesionalidad y la enorme personalidad de sus tres intérpretes principales, la mano maestra de su director y la también ya mítica banda sonora de Ennio Morricone.
La extraña "amistad" entre Rubio y Tuco, ahora somos amigos, ahora no, es uno de los alicientes, mientras que Sentencia deja claro que él no es amigo de nadie en ninguna situación pero siempre está dispuesto a aliarse con el que más le conviene... casi como los políticos de hoy en día.
La escena final, el duelo a tres bandas en el empedrado del cementerio, es un magnífico broche de oro a una historia de tres hombres persiguiendo su jubilación anticipada, un buen montón de dólares que esperan a que alguien, con un par de tiros, se haga con ellos.
En resumen, una película de culto que a muchos les puede resultar sencilla e infantil, pero el que hasta Tarantino sea uno de sus grandes fans no hace sino reforzar el criterio de los que la veneramos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Algunos detalles y escenas destacadas:
La terrorífica sonrisa de Lee Van Cleef sentado en la mesa poco antes de matar a todos los integrantes de una familia
La prueba del revólver que hace Wallach en la tienda que regenta un venerable viejecito
El "paseo" a pie por el desierto de Eastwood, acompañado de Tuco montado a caballo y con una sombrilla femenina para protegerse del sol
La conversación de Wallach con su hermano, fraile en el monasterio
Tuco sorprendido desnudo en la bañera llena de espuma por uno de sus enemigos que perdió un brazo en un tiroteo anterior con él
El encuentro de Rubio y Tuco con los "nordistas" cubiertos de polvo
La voladura del puente que separa a los nordistas de los sudistas
Eastwood ofreciendo una calada de su eterno cigarro a un soldado moribundo
Tuco corriendo por el cementerio buscando la tumba donde está enterrado el dinero
Los diferentes planos del duelo final entre los tres protagonistas, pasando de sus ojos a sus manos y viceversa
La terrorífica sonrisa de Lee Van Cleef sentado en la mesa poco antes de matar a todos los integrantes de una familia
La prueba del revólver que hace Wallach en la tienda que regenta un venerable viejecito
El "paseo" a pie por el desierto de Eastwood, acompañado de Tuco montado a caballo y con una sombrilla femenina para protegerse del sol
La conversación de Wallach con su hermano, fraile en el monasterio
Tuco sorprendido desnudo en la bañera llena de espuma por uno de sus enemigos que perdió un brazo en un tiroteo anterior con él
El encuentro de Rubio y Tuco con los "nordistas" cubiertos de polvo
La voladura del puente que separa a los nordistas de los sudistas
Eastwood ofreciendo una calada de su eterno cigarro a un soldado moribundo
Tuco corriendo por el cementerio buscando la tumba donde está enterrado el dinero
Los diferentes planos del duelo final entre los tres protagonistas, pasando de sus ojos a sus manos y viceversa