Mi interés por la película era un tanto nulo ya que personalmente no soy fan de Kevin Costner pero verle en una faceta similar a Liam Neeson en cintas como Venganza me agrada bastante ya que vemos su cara más carismática, divertida y ante todo rejuvenecida. No es una cinta que haya triunfado en taquilla pero tampoco parece que haya resultado un fiasco. No es una buena película pero tan poco una aberración en cuanto a thriller y cine de acción. Es cierto que en lo referente al género no termina de tomar un rumbo ya que no sabemos si es un drama familiar, una comedia, una cinta de acción o un thriller de espionaje. Vemos la lucha por la supervivencia, la protección y amor hacia su familia y a la vez el trabajo sucio del señor Costner. Una versión madura de Transporter que con algunos toques de calidad y escenas memorables como la de la discoteca con Hailee Steinfeld o el I don't care en el móvil queda bastante bien aunque se repita tantas veces que el chiste acabe perdiendo su gracia.
McG dirigió recientemente también la sorprendente aunque previsible Esto es la guerra que me resultó bastante divertida para lo que esperaba de un producto así. Tras ver esta me doy cuenta de que a McG le sienta más el tono cómico que dramático y que donde mejor funciona 3 días para matar es donde más le cuesta que es tomar un rumbo, si tomársela en serio o no, los guiones que escoge McG no son sorprendentes pero garantizan entretenimiento y disfrute y en esta ocasión siendo más de lo mismo ha logrado encandilarme y ganarme un personaje realmente interesante.