Nunca me había parado a ver esta película, quizás porque cuando he empezado a ver buen cine de verdad ha sido en estos dos últimos años y la verdad es que por fín he podido verla, me arriesgué al comprarla en bluray (como ya me pasó con Matrix) ya que no la había visto pero como se suele decir, quien no arriesga no gana y yo he ganado o al menos me considero un buen comprador de esta maravillosa cinta de David Fincher de la que solo muestro halagos.
Ver a Brad Pitt y Edward Norton en pantalla sabía que no me iba a decepcionar y todo lo contrario, me ha impactado, asombrado y dejado K.O como deja Norton a Leto en un momentazo de la cinta. Una película que ha dado mucho de que hablar, que no fue un taquillazo, es más, solo recaudó 100 millones habiendo costado 63 y que poco a poco se ha ido convirtiendo en una película de culto, una de esas 100 películas que tienes que ver antes de morir. Interpretaciones sublimes por parte de Norton y Pitt, unos notables actores secundarios, momentos divertidos, llenos de acción y una historia verdaderamente original con unos dialogos para la memoria del espectador además de un final espectacular e imprevisible, de esos que te atacan la mente como ya lo hicieran Origen o Shutter Island. Una banda sonora perfecta para cada situación y una excelente fotografía con planos muy bien enfocados además del tono del color de la cinta que es mas bien oscuro.
En definitiva, 136 minutos de paranoia psicológica, de acción pura y dura, de algo que nunca has visto ni verás, algo espectacular y para nada habitual con dos interpretaciones lujosas, destacando mas la de Norton con una dirección sublime del extraordinario David Fincher que él mismo es el que ha creado El Club de La Lucha por conseguir películas que se hagan hueco en la historia como Seven o esta misma cinta. Grandiosa.