Uno se pregunta, ¿cómo se puede adaptar al cine uno de los ensayos más deslumbrantes de lo que llevamos de Siglo XXI?, ¿cómo puede llevarse a la gran pantalla una obra realista pero que no es una historia sino el retrato de una región machacada por el crimen organizado? Garrone ha hecho lo único que se podía hacer: una película.

A ver, cuando adaptan una obra procedente de otros medios los cineastas suelen encontrarse ante la disyuntiva de ser muy fieles o hacer una película, crear otra obra a partir de la original, aunque se respete su espíritu y en general la historia que se va a contar. En más de una ocasión tratar de ser muy fieles a la obra de referencia da lugar a películas extrañas, aburridas y que no entienden más que aquellos que conocen el original. Es decir, que acaban por provocar el efecto contrario al que buscaban y pasan al saco de las adaptaciones fallidas.

Por eso, las mejores adaptaciones son las que tratan de adaptar al lenguaje del cine lo que originalmente está narrado en el lenguaje de un medio completamente distinto. En el caso que nos ocupa, Garrone coge varias de las historias reales que Saviano nos contó en el libro y hace con ellas una película coral, rodada en corte muy realista, casi documental (¿influencia neorrealista?), pero que no se recrea en el morbo gratuito y que logra transmitir las ideas principales presentes en el ensayo: el dolor por una tierra mantenida en la miseria, la ignorancia y el miedo, las generaciones que se pierden entrando al servicio de la Camorra, la violencia indiscriminada, como toda la sociedad asimila bien la sed de poder, bien la resignación sometida... También se reflejan casi todos los negocios en los que el crimen organizado hunde sus tentáculos y asfixia la tierra que dicen amar: tráfico de drogas, armas y mercancía ilegal, tratamiento fraudulento de residuos, talleres textiles en régimen de semi esclavitud, etc.

Mención aparte a los actores, que están casi todos espléndidos. Sobre todo un magnífico Toni Servillo, con una actuación muy de old school italiana.

Con todo, se le pueden reprochar dos cosas a la peli. Una de forma: es demasiado larga, o al menos se hace larga. Quizá es demasiado redundante por momentos. Dado que el objetivo es transmitir más una idea que una historia (de hecho, algunas historias ni las acaba), podía haber metido tijera a por lo menos veinte minutos del metraje.

Sigo en spoilers, que me quedo sin espacio (pero no hay spoilers).