Cuando vi este cortometraje dije será muy aburrido al ver un anciano jugando ajedrez y sobretodo no hay nadie que juegue con el, pero me dejo con la boca cerrada. La verdad como dice su descripción con el pasar del tiempo va evolucionando y no pareciera que fuera el mismo personaje, sino dos. Es algo impresionante como la astucia de los creadores en hacer que el espectador se quede hasta el último minuto es algo muy bueno e inteligente.

La verdad un final muy bueno e imaginable. Un arte.