3 de abril de 2013
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Interesante película. Me ha gustado el planteamiento inicial, la estética, el ritmo pausado y como vamos descubriendo a las diferentes prostitutas, sus deseos, sus historias.... pero poco a poco va perdiendo fuerza y deja pasar la oportunidad de hacer una gran película.
Está muy bien mostrar que las prostitutas que parecen alegres y felices no lo son. Que no dejan de ser meras esclavas de la Madame que les cobra por todo. Como las jovencitas idealizan la profesión, para con el paso de los años, acabar asqueadas esperando que alguno de sus clientes habituales les proponga matrimonio y puedan salir de "la casa de tolerancia". También queda claro que los clientes adinerados no son más que meros explotadores y en la mayoría de los casos gente insaciable que busca una nueva perversión para poder lograr el placer.
Tampoco acabo de compartir la idea que parece plantearnos, según nos muestra en el Paris del siglo XIX los burdeles eran de lujo y con la entrada del XX tienen que cerrar y "el amor pasa a las calles". Antes y ahora hay prostitución, por algo dicen que es la profesión más antigua del mundo, pero antes también había prostitutas de alto standing y de "esquina" como ahora. La escena final remarca que en el siglo XXI todavía es peor, escena que sobra y rompe del todo la estética.
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?