Mediocre y previsible film de acción protagonizado por el inexpresivo Chuck Norris. La trama gira en torno al secuestro de un avión perpetrado por extremistas islámicos. A pesar de la poca calidad, "Delta Force" podría haber sido una entretenida cinta con múltiples secuencias de lucha, tiroteos y efectos especiales varios aprovechando las cualidades de Norris, interpretativas ninguna, pero sí con respecto a artes marciales, saltos y acrobacias; sin embargo tampoco hay mucho de esto, resultando ser un relato con un ritmo cansino que no invita a otra cosa que a echar un sueñecito. Lo mejor son las interpretaciones de George Kennedy como un valiente sacerdote con un heroico comportamiento y Bo svenson, que encarna convincentemente al capitán del avión secuestrado. Pero entre la machacona y repetitiva banda sonora de Silvestri, el pasotismo interpretativo del otrora gran Lee Marvin, que parece tomarse como un castigo intervenir en esta producción y el escaso talento de Golan (director y guionista) para crear suspense, con una pésima narración de los hechos, hacen de "Delta Force" un producto muy poco recomendable.