Yo destacaría la escena de la cena, cuando el profesor de universidad ya mayorcete (John Mahoney) discute con su acompañante-amante y alumna mucho más joven y ella se marcha arrojándole un vaso de agua y es invitado por Olympia Dukakis (gran pozo de sabiduría y paciencia) a cenar con ella. Se encuntra tambien sola porque su marido está con su amante en la ópera. Cenando, ella le aconseja "no cagues donde comes" (relación profesor-alumna), y le hace la pregunta de millón a él: ¿Por qué los hombres persiguen a las mujeres?. Él reponde: Por los nervios. Ella le corrige: "Es porque tienen miedo a la muerte."
Quizás el afán de conquista; el interés por transmitir unos genes que nos condicionan a comportarnos como lo hacemos o dígase afán de supervivencia o porque somos simplemente unos inconcientes y estúpidos.
O digo yo, será porque cuando quieres, amas, deseas y eres correspondido es cuando realmente te sientes vivo y además nos gusta lo prohibido. Le doy la razón a ella: "Nuestro desconocimiento sobre las mujeres es enorme".