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Rusia Rusia · Stalingrado
Voto de Ferdydurke:
5
Drama Elmer Gantry (Burt Lancaster) es un hombre atractivo, oportunista y absolutamente inmoral. Tras asistir, por casualidad, a una reunión religiosa, se da cuenta de lo fácil que es ganar dinero como predicador y se convierte a la religión Evangélica. Con la hermana Sharon Falconer (Jean Simmons) a su lado, Elmer pronuncia unos estremecedores sermones que le permiten conseguir fama y dinero. Pero un periodista (Arthur Kennedy) sigue sus ... [+]
9 de agosto de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pasmábase. Cóctel de gambas. El tren. La era de la aspirina.
Es una película interesante porque tiene buenos personajes y situaciones poderosas y metáforas, ruido y furia, un retrato de América, en su debe que dramáticamente es muy gruesa, chillona, estrepitosa, tosca, conducida y pedestre, altisonante, vocinglera, exagerada, expresionismo feroz y subrayado soliviantado, odio a la sutileza.
El periodista es Pepito Grillo, el personaje más honesto (no así los periódicos), el que observa o mira con benevolencia socarrona compasiva, Elmer, el protagonista, es una atronadora fuerza de la naturaleza, compleja, claroscura, rica, ambigua, lo mismo que ella pero la santa es más débil, frágil y vulnerable, flor marchita que él revive (brujas de eastwick), vida le insufla, casi todos individualmente valen, más o menos, la pena, lo cual, su valor humano, se difumina o degrada esfuma en cuanto forma parte de instituciones, grupos o masa, todos los cuales son vistos como chusma infecta y manipulable lerda mezquina e histérica o totalmente corrupta abyecta.
Sí, la religión es el opio del pueblo, un espectáculo horrísono baboso morboso mostrenco en manos de mercaderes con pocos escrúpulos o ninguno, un circo, un horror y un calmante purgante, la vida es muy sórdida, hay que escapar de ella como sea, agarrarse a lo que salga o surja (mejor Dios que una mierda de aspiradora).
América es un abrevadero, llegados de todas partes del mundo y en medio de una inmensidad, de ninguna parte que es todas a la vez, la religión, allí, es más necesaria que nunca, tiene un significado, ardiendo clavo (a falta de otra cosa).
Al final, lo de siempre, la mentira como esperanza, la burda narrativa como narcótico o moral viático, efecto placebo, el dinero y el amor (sexo) moviendo los hilos, de fondo, eso es todo si le sumas la muerte como el límite del teatro de variedades, su techo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
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