Tantas vueltas para acabar en lo mismo, tiene un estética noventera decadente chula vacua pese a estar fechada en el 2000 y Cage todavía estaba bien y ella cadavérica.
La historia es de derribo, pero no tan mala como aparenta o quiere desesperadamente ser, se deja ver, tiene un pasar y un llevar. Falla como casi siempre en estos casos de cacos en el malote que nos da mucha pena, de saldo es poco, en cambio el poli no está tan mal y los compañeros de armas, vaya, hay de todo, desde mucho tonto a un jefe que al final despierta.
Superficialidad y tontería en estado puro, sin adulterar ni na, estilizada en su falta de sustancia alma, maqueada y humilde al fin y al cabo, ya dijimos, correcta en lo suyo, un producto listo para el consumo, capitalismo guapo duro.