Debí hacer caso a las críticas profesionales, que ya advertían de que todo se quedaba en una colección de escenas visualmente muy atractivas, pero vacías. Mi novia y yo nos hemos pasado toda la película intentando buscarle sentido, creyendo que había un puzzle que recomponer. Inventando teorías. Desde que los personajes de McGregor y Gosling eran la misma persona, a que estaba en el purgatorio. Y cuando la película concluye resulta que no hay puzzle. Que todo lo resuelven con una simpleza absurda.

Primero me siento desconcertado, y luego estafado.