1.- Para mí, es un 8, una de esas que hay que ver.

2.- Una muy buena película que narra la redención de un samurái que se ha traicionado a sí mismo y que ha jurado no volver a desenvainar.

3.- El guión es algo flojete, pues coje un contexto común, y desarrolla todo como esperamos: un golpe de estado, una invasión y un encuentro fortuito. Con un poquito más, sería de 9.

4.- Aquí sí que gana la película. Son muchos pequeños personajes que se unen en tres posturas diferenciadas: el poder, la vergüenza y el deber. Quiero destacar como, en esta gran confrontación, se ve incluido Nanashi, el samurái caído en desgracia, y como se entrega a la causa.

5.- Lo mejor son las escenas de acción, muy realistas e imposibles de ver en cualquier película con actores reales, por éstas ha sido por las que la recomiendo.

6.- No me ha gustado el matiz fantástico que le dan, lo de la inmunidad al dolor, que sólo tiene sentido en la última escena en la que Nanashi mantiene su espíritu "puro".