Enésima producción que pretende seguir la estela del Señor de los Anillos, esta vez con la excusa mitológica de Perseo, que no aporta nada al género épico y mucho menos al panorama cinematográfico actual.
Por supuesto se repiten todos y cada uno de los tópicos de los últimos diez años, así la película se reduce al típico grupito heterogéneo que vive aventuras y se va cargando monstruos. Tenemos a la chica mona, Ío, que no sé qué coño pinta en esta historiaí, el consejero del prota a lo Qui-Gon Jinn, a los dos tontos simpáticos con acento mongol que la palman antes que nadie, al bicho raro que parece malo pero al final resulta que no, y por supuesto al héroe buenorro cuyo atractivo es inversamente proporcional a la inexpresividad de su interpretación. Del cual sólo sabemos que ''noquieroserundios'', ''noquieroserunodeellos'' y a quien su actor de doblaje no le hace ningún favor extra.
Por lo demás muchas peleas, muchos giros bruscos de cámara, y un ritmo rápido pero con pocas cosas que contar, interrumpido por algún que otro flashback que más que completar la historia la entorpecen. Por supuesto se han pasado por el forro la mitología griega y no con muy buen resultado (omisiones absurdas, personajes metidos con calzador...). Ambientación burda donde las haya y qué decir de los efectos especiales: parece un capítulo de Xena alargado, serie cumplía en su contexto televisivo pero un producto cinematográfico con estas características en pleno 2010, como que no.

Igual o peor que ''La última legión'', film con el que guarda muchos paralelismos, tanto en intención como en resultados.