Cuatro tipos se dirigen a celebrar la despedida de soltero de uno de ellos a Las Vegas, a lomos de un precioso Mercedes-Benz 280 SE Convertible del 69 prestado para la ocasión por el padre de la novia, Tracy (Sasha Barrese), a saber: el novio, Doug (Justin Bartha), el maestro de escuela Phil (Bradley Cooper, el cocinero destroyer trasunto del genio de los fogones Anthony Bourdain en una de las más divertidas y desconocidas series de los últimos tiempos, “Kitchen Confidential”), Stu (Ed Helms), un dentista que tras 3 años de relación miente a su novia diciéndola que va a Napa Valley y no a Las Vegas, y por último el hermano de la novia, Alan (Zach Galifianakis), un tipo corpulento y pirado, al que hasta ese momento solo conoce a fondo el novio y que ya desde los preparativos se huele a la legua que va a dar que hablar.
Con esta premisa, que nos ha dado alguna que otra divertida producción (“Very bad things”, “Airbag”) en manos de Todd Phillips (hace un cameo en el que le vemos de rodillas con la cabeza entre las piernas de una mujer que se encuentra de pie en el interior de un ascensor, que había sido llamado por nuestros celebradores cuando se dirigen por primera vez a “dejar salir al perro”), el tipo responsable de “Road Trip” y “Aquellas juegas universitarias” (no son “Desmadre a la americana” pero si perdurables en la memoria como algo divertido), tenemos una entretenida y divertida película, que si bien no se trata de ninguna obra maestra, puede acompañar perfectamente a las dos arriba mencionadas como referencia del subgénero “despedidas de soltero pasadas de rosca”, en base al divertido desarrollo de la trama cuando despiertan con un resacon del 12 sin recordar absolutamente nada, a algunos buenos gags, a la siempre agradecida presencia de una siempre guapísima Heather Graham en un breve papel de una stripper, madre soltera y de buen corazón (imposible no acordarse el episodio 2x13 de Los Simpsons en el que Homer y Flanders viajan a Las Vegas), de un fiero y vacilón Mike Tyson interpretándose a sí mismo y de Mike Epps (no se pierdan su anterior trabajo, “Next Day Air 2009”) como Black Doug, el camello que confunde la mercancía, sin olvidar la escena del tigre en el cuarto de baño del hotel (me vino a la cabeza la escena del león en los baños del Retiro madrileño en, “To er mundo es gueno” de Summers).
Mejor y más divertida que el ultimo taquillazo en cuanto a comedia en los USA (Paul Blart: Superpoli de centro comercial) sin ningún género de dudas.