Blue Sky ha encontrado su clásico. Así de claro.
Epic no sólo es la mejor película animada en lo que va de 2013, sino que también es una película casi casi al nivel de los clásicos de Disney y Pixar, con las que tiene mucho en común. No hay rastro del humor facilón de otras películas de la casa, como las secuelas de Ice Age, ni de la habitual vagancia creativa de Dreamworks (salvo honrosas excepciones... o sea, Cómo entrenar a tu dragón). Epic quizá no esté al nivel técnico de Monstruos University en su animación (y aun así, no pierdan detalle de los movimientos de cámara en las luchas o la persecución por el bosque de la reina Tara, que parece sacada de un videojuego), pero es todo corazón, todo alma. Hacía mucho tiempo que una compañía que no fuera la incomparable Disney/Pixar (juntas o por separado, pues ambas han sido siempre la misma cosa, incluso antes de comprar la primera a la segunda... y me estoy refiriendo a su concepción del cine y el tono inconfundible de sus películas) hacía una cinta tan entretenida, divertida y sobre todo entrañable. Epic tiene magia, tiene una grandeza emocional única y nada forzada, que se sustenta en personajes carismáticos y llenos de encanto levantados por las excelentes voces originales de Josh Hutcherson, Amanda Seyfried, un espectacular Colin Farrell o Jason Sudeikis (incluso los cantantes Steven Tyler, Beyoncé y Pitbull trabajan a un altísimo nivel). Además, es pura aventura, una de las más perfectas también de los últimos tiempos, con sus héroes y villanos, sus batallas, sus conflictos, su ritmo perfecto y endiablado que impide el aburrimiento... pero como decíamos antes, Epic es sobre todo magia, encanto, y belleza, que es lo que caracterizaba a las películas de animación antes de que llegaran las secuelas insulsas y las comedietas absurdas al género. Y sobre todo es emoción y una historia sobre la madurez, las relaciones entre padres (auténticos o putativos) e hijos y la enésima batalla del bien contra el mal en una lucha desesperada por salvar la Madre Naturaleza que representa este mundo secreto de los Hombres Hoja. Son tantas las escenas memorables, tantos los momentos inolvidables que es difícil destacar solo algunos, pero ahí va una breve selección: la última escena de la reina tara, la persecución de ésta por el bosque, el encogimiento de MK, cada vuelo en pájaro por los aires, la visita al árbol de Nim Gallu, el final, la secuencia en que MK y sus amigos vuelven a la casa de la joven, o cada una de las apariciones de Ozzy, el perro más simpático de los últimos tiempos).
No pierdan el tiempo leyendo esta crítica: véanla. Si son fans del buen cine de animación y del buen cine de aventuras, les aseguro que no se arrepentirán.

Lo mejor: Todo
Lo peor: Nada. Si no se lleva el diez es porque a la animación le falta un pasito para ser sobresaliente, pero aun así es tan buena que no vale mencionarla como "lo peor".