No, no es genial. Pero le falta poquito. Quizás sea problema del guión, quizás del montaje, quizás del enfoque...no lo sé con certeza. Lo que sí sé es que no es culpa del final, al menos no del todo.
Vayamos por partes.
El inicio es, cuanto menos, poco prometedor. Historia ya conocida (un muñeco poseído, menuda novedad) y ambientación típica (una casa antigua y grande con pasado oscuro, muy novedoso también). Pero poco a poco va enganchando y la verdad es que el muñecote, sin hacer casi nada, provoca escalofríos en más de una ocasión.

Hasta aquí bastante bien, mejorable siempre, pero en líneas generales bastante mejor de lo que esperaba.

Y llegamos al final.
La verdad es que el problema en sí no es la resolución de la historia (desde mi punto de vista), sinó la forma en que se desarrolla. Se pierde toda la tensión acumulada, las escenas que siguen no són lo bastante contundentes y el enfoque es un poco del palo "ya hemos desvelado el misterio, vamos a terminar que se nos hace tarde", cuando es aquí dónde deberían haber puesto toda la carne en el asador y redondear un filme sin pretensiones, pero bien desarrollado en sus dos primeros tercios.

Si se me permite la comparativa, ocurre algo parecido con el final de "10 Cloverfield Lane", pero a la inversa. En aquella, el director es consciente de que el final tiene que estar repleto de escenas impactantes para funcionar y vaya si lo consigue. Igual en alguna se pasa un poquito, pero se le perdona, como se perdona al cocinero que las patatas fritas no estén en su punto cuando el bistec está perfecto.