Heredera del estilo marcado e iniciado por "Ciudad de Dios" (Fernando Meirelles & Kátia Lund, 2002), de hecho Meirelles es productor ejecutivo en esta oportunidad, "Antônia" busca por el costado más femenino mostrar la realidad del universo de las favelas a través de un cuarteto musical.

Si ponemos de manifiesto las diferencias más grandes con su predesora, el principal problema es que el <<narrativamente muy rico>> universo de las favelas de Brasil aquí queda pintado de manera muy superficial, apenas somos testigos de un par de eventos que suponen que éste es el marco geográfico del film (el ataque a Duda, el novio de Lena, la situación de Preta y poco más).

Los obstáculos que esto supone en las vidas de las cuatro protagonistas, eso sí muy bien definidas y carismáticas, son bastante planos. La pelea casi infantil entre Preta y Mayah, el embarazo poco aprovechado de Lena, la inverosímil pelea mortal de Barbarah, lo más interesante es la vida familiar de Preta que tampoco se termina de desarrollar.

Todo cae muy de golpe, Mayah desaparece durante casi una hora de película, el novio de Lena no está correctamente desarrollado como para que uno pueda interpretar sus constantes cambios de humor, el personaje de Marcelo Diamante llega de la nada y se vuelve colega de las chicas de la noche a la mañana, el episodio de Barbarah con el chiquillo futbolista es demasiado inverosímil y casi irrisorio. Esto hace que la trama avance a tropezones. Algo que está también bastante marcado por su montaje brusco y desaliñado, así como también por la fotografía de estilo documentalista.

Lo que realmente hace a "Antônia" un film atractivo es su música, clara protagonista del film; y su cuarteto de actrices, muy bien todas, y con personajes que pese a las carencias del guión están bien definidos y son atractivos.