A simple vista esta peculiar propuesta parece ser "otra estúpida película americana más" del montón, de esas que abundan y solo sirven para llenar catálogos y ser olvidadas casi de inmediato y a pesar de que si, esta poblada y atiborrada de personajes idiotas, la historia en si es algo "tonta" y si, parece querer ser casi que "monumento" a la estupidez humana en todo momento. Pero no, es todo lo contrario.

Posiblemente estamos frente a la mejor descripción que se haya hecho en una film sobre la sociedad globalizada actual, a través de una comedia en apariencia "sencilla", se esconde una ácida, corrosiva, mordaz y muy inteligente crítica contra el corporativismo brutal que maneja los hilos del mundo. Se nota la mano en el guión de Etan Cohen.

Una feroz burla a los más poderosos disfrazada con mucho humor negro y revestida de unas punzantes lineas que si bien causaban gracia por aquel entonces, hoy 17 años después, lo siguen haciendo, pero al mismo tiempo me asusta y sorprende ver que posee algunos puntos inquietantemente proféticos que sin exagerar se están haciendo realidad en eso que llamamos "cultura globalizada".

Definida por cierto critico como "La película estúpida más inteligente que se ha hecho nunca". Y no se equivoca porque así es esta desquiciada, descerebrada, arriesgada, divertida y algo escatologica película dirigida por Mike Judge (si, si el mismo que nos trajo aquella serie animada "Beavis & Butt-head").

Sobre el reparto destacar la buena onda de todos los implicados, Luke Wilson, Maya Rudolph (imposible que esta señora caiga mal a alguien) Terry Crews, Dax Sheppard, David Herman, Sara Rue, Stephen Root, Justin Long, Thomas Haden Church y Robert Musgrave.

Los seres humanos, fuimos idiotas, somos idiotas y al paso que vamos, seguiremos siéndolo en el futuro. Y si piensan que soy "exagerado" solo basta recordar que premiaron en los Grammys esa cosa que hace el tal "Bad Bunny". Creo que eso es una señal de que hacia allá vamos "Idiocracia".