Sólo con el principio de la película, merece la pena verla. Con la sencillez de unos dibujos y una música acertadisima, la presentación de la historia resulta de una ternura desgarradora. No puedo mas que llorar cada vez que la veo. La gran emotividad de los primeros minutos, la arrastra la pelicula en todo el resto. Todo queda bañado con un aura de nostalgia y tristeza que no abandona en ningun momento. Una historia de amor, adornada con una aventura para niños, pero al fin y al cabo, una historia de amor. Las historias que de verdad llegan hasta lo mas profundo de cada uno.