Haz click aquí para copiar la URL
España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
9
Aventuras. Drama Gloucester, Massachussetts, octubre de 1991. El Andrea Gail es un barco de pesca capitaneado por Billy Tyne (George Clooney), un veterano pescador cuyas últimas salidas se han saldado con paupérrimas capturas. Buscando un golpe de suerte que haga cambiar esta mala racha, se interna en el Flemish Cap, un lugar más allá de las zonas frecuentadas por los pescadores. Lo que ignora es que, a la zona donde faena, se está aproximando la ... [+]
3 de marzo de 2021
0 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
45/10(08/02/21) Infravalorado drama de aventuras esta oda a los trabajadores ordinarios (y sobre todo a la gente del mar), al eterno enfrentamiento del Hombre contra la Naturaleza, a los servicios de rescate que arriesgan sus vidas para salvar otras, a la épica de buscar el Sueño Americano. Dirigido de modo vibrante por el germano Wolfgang Petersen, adapta el libro de no ficción homónimo de 1997 de Sebastian Junger, guionizado con alteraciones por William Dale Wittliff (“Leyendas de pasión”), con claros ecos a grandes relatos del mar como “Moby Dick” o “El viejo y el mar”. Es la historia del Andrea Gail, barco de pesca comercial que quedó atrapado en la llamada Tormenta Perfecta de 1991, siendo protagonizada por unos inspirados George Clooney, Mark Wahlberg, Diane Lane, John Hawkes, William Fichtner, Michael Ironside, John C. Reilly, y Mary Elizabeth Mastrantonio. Estas interpretaciones y guión en miscelánea con la fascinante ambientación potenciada por la formidable fotografía de John Seale, los efectos digitales de Industrial Light & Magic, y la epidérmica música de James Horner.

Tiene un comienzo excelente, tras emocionante prólogo con cámara sobre el muro de hombres perdidos en el mar del Ayuntamiento (cerraremos circularmente con él), gran presentación de este pueblo pesquero (Gloucester, puerto pesquero más antiguo de América) y de protagonistas, con llegada al puerto de la flota de barcos de pesca (especialistas en pez espada) tras tiempo fuera, las mujeres corren al encuentro de estos lobos de mar, bullicio, pesaje dela carga, encuentro con los seres queridos, alegrías y decepciones, abrazos, besos, ausencias, cual soldados cuando vuelven de la guerra. La presión por parte del armador por un trabajo regular, borracheras, bromas, noches de sexo para recuperar tiempo perdido, la camaradería, adornado por el maravilloso ‘Hungry heart’ de Bruce Springsteen. Inicio que hace los personajes nos interesen e importe lo que les pase.

Cuando estamos en el mar con el Andrea Gail nos sentimos inmersos en la dura vida pesquera, cual Petersen hacía en su magna “El submarino” (1981), hace del angosto lugar nuestro hogar para lo bueno y malo, sentimos las decepciones de los marinos, sus dudas, sus alegrías, sus miedos, con una cámara que se mueve con fluidez por la nave, por su cubierta, comedor, o su bodega de carga, todo se siente realista, desde “Capitanes intrépidos” (1937) no había un homenaje a estos trabajadores, haciéndonos sentir el séptimo entre la tripulación. Por lo qeu cuando tras mil y un vicisitudes, nos vemos ante el desafío que les propone el capitán a sus marinos, cual film del oeste, si esperar a que el Malo (La Tormenta Perfecta) pase, o enfrentarlo, un escalofrío nos entra (por lo menos a mí) cuando deciden intentar sortear su mala suerte yendo a por él de cara, David contra Goliat. Duelo entre la pequeñez del ser humano contra la inmensidad omnipotente de la naturaleza, la Fe sin límites contra el Todopoderoso, un choque desigual con pequeños triunfos mientras se avanza a duras penas contra el Titán de la tormenta, con escenas espectaculares, vigorosas, electrizantes, pero el Coloso resulta infinito en su afán de destrozar la osadía de los hombres, Homérico duelo.

Hay una historia paralela que nos meten in media res sobre un velero de recreo, el “Mistral” (en realidad se llamaba “Satori”), con dos mujeres (desaprovechadas Chery Jones y Karen Allen) y un capitán (otro tanto Bob Gunton) arrogante a bordo que se resiste a pedir ayuda. Al final la Guardia Costera debe ir a rescatarlos en helicóptero, luego deben ser ellos los rescatados por el guardacostas. Maravillosamente filmado, con gran tensión dramática, un tributo a esos héroes que en las peores condiciones se adentran en las fauces de la bestia para intentar sacarnos de ellas. Pero aunque estaba en el libro me resulta, irregular, pues con los que empatizado es con los pescadores, son los que nos importan, estos del velero no me interesan, con lo que cojea por esta subtrama; Por otro lado si me son emocionantes los segmentos en tierra en Gloucester de cómo los familiares y conocidos se apiñan en la taberna inquietos y temerosos del futuro del Andrea Gail, sentimos su zozobra y desaliento. Siendo estremecedor es cuchar al veterano lobo de mar Quentin (brillante en su poco tiempo en pantalla Sandy Ward), "Estuve allí (en el caladero de Flemish Cap, donde está el Andrea Gail) por última vez en el 62. Mucho pescado. Mucho mal tiempo"; Todo ello hace que en el clímax me emocione y me remueva en el asiento, cosa que no se consigue muchas veces.

Tenemos al orgulloso Capitán Billy Tyne encarnado por George Clooney, patrón del Andrea Gail, otrora gran pescador, ahora sus pescas son escasas y desea resarcirse. El actor lo encarna de modo formidable, con aspecto de dejadez, barba de varios días, cabello grasiento, lo sientes mimetizado con el rol de capitán a los mando de su nave, infunde intensidad a su personaje, estupendo cuando se dirige a sus hombres exponiéndoles encrucijadas, maravilloso en el clímax su mirada mientras se enfrenta a olas pantagruélicas en medio de la tormenta (“No nos dejará salir” dice ante la visión de la desatada naturaleza marítima). Mantiene una entrañable relación con la capitana del Hannah Boden, Linda Greenlaw, tiene una grácil competencia, pero destilando cariño soterrado entre ambos. Mary Elizabeth Mastrantonio le da vida con gran sensibilidad racial, soberbia mostrando su desesperación en la última comunicación con Tully, o en ese conmovedor discurso final en la Iglesia; el joven Bobby Shatford al que da vida Mark Wahlberg dota de vitalidad pasional a su personaje, teniendo una gran química con Clooney. Está enamorado de la madre divorciada Chris Cotter (buena Diane Lane), entre los dos hay un gran amor, pero ella le empuja a dejar el mar, pero las necesidades pecuniarias son grandes. Además es hijo de Ethel Shatford (gran Janet Wright), la dueña de la taberna del muelle Crow's Nest;...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow