Vistos los primeros capítulos es una serie que me ha parecido interesante, muy interesante. Tiene un toque "añejo", tanto en su estética, como en su argumento. Pues en vez de plantear una trama más en línea con lo que se lleva hoy día, tiene reminiscencias de los clásicos "culebrones" sobre miembros de una misma familia y sus relaciones interpersonales. En lo positivo también están unos actores sólidos, una estética cuidada, una fotografía cuidada, etc.

La parte que menos me ha gustado es el comienzo, muy lento, con un "piloto" falto de ritmo. Sin embargo, al llegar a su cliffhanger, la serie cobra un interés renovado que hace que te interese seguir viéndola. Será cuestión de tiempo decir si la serie va a más, y alcanza cotas notables o sobresalientes, si se mantiene o si por el contrario se despeña hacia lo prescindible.

De momento, en sus comienzos sólo puedo decir que es una buena serie y que merece la pena echarle un vistazo.