Mientras su predecesora nos enseñaba el ambiente marginal, aquí nos da una perspectiva de la situación de los ricachones.

Mejora con respecto a su predecesora, ya que le dota de un poco más de acción y se le ve a Torrente en otro ambiente diferente, esta vez siendo detective privado y abriendo una escuela de detectives.

La verdad, está mejor que su predecesora y me gusta un poco más.

Cierto es que la canción de Raphael se sale, je, je, je (otro aspecto que hace mucho mejor a esta secuela) .