A partir de esta pregunta Akira Kurosawa rodó "Rashomon", centrándose en el juicio que se realiza a varios implicados en un crimen. Quizá lo más destacado de la película sea la manera de contar la historia, con un paralelismo entre los que conversan en el templo para refugiarse de la lluvia y el punto de vista de cada uno de los afectados en el proceso judicial. Curiosamente no vemos a ningún miembro del tribunal encargado de dictar sentencia, sino a los personajes que testifican, dirigiéndose hacia el espectador.
Bajo mi punto de vista, sin ser aficionado al cine japonés, "Rashomon" puede significar una buena primera aproximación al séptimo arte nipón. Ahora, de ahí a intentarlo con superproducciones de tres horas de Kurosawa como "Los siete samurais" o "Ran", es para pensárselo.
Nota: 5,8