Jason Reitman nos trae un film que se adapta a las necesidades de todos sus espectadores: es lo suficientemente pícara y atrevida pero al mismo tiempo es tierna y conmovedora, que aunado a lentos avances, diálogos sarcásticos y que a muchos nos evoca a Juno y Gracias por Fumar, este director definitivamente conoce la manera de mostrar varias sensaciones en una sola línea, en una sola trama.

Definitivamente es la película con la que he logrado mayor conexión con alguno de sus personajes, creo que desde que inicia hasta que culmina, el personaje de George Clooney no puede ser más natural, a veces creo que eran bofetadas para esa poca población de hombres que pensamos y actuamos como él. Aplaudo también las actuaciones nada exageradas de Vera Farmiga y Anna Kendrick. Excepcionales en sus papeles.

Creo que Reitman nos complace una vez más para aquellos espectadores que no esperamos flmes empalagosos, exagerados ni sobreproducidos y que definitivamente invito a ver y disfrutar. ¡Enhorabuena Jason Reitman!