Werner Herzog es una personalidad controvertida. Pero más allá de debates estériles, lo que creo que está claro es que su personalidad es necesaria en un mundo como el nuestro, en que el ser humano parece haber perdido toda fuerza creadora. Pero además, la película tiene considerables capacidades comerciales, con lo que no se entiende el sinsentido de que la película nunca fuera estrenada en una sala de cine, sino que pasó directamente al mercado doméstico, siendo estrenada en DVD.

Curioso que Werner Herzog se meta en un tema tan interesante pero a la vez tan aparentemente lejano como es el conflicto bélico del Vietnam. Es cierto que la carrera de Herzog nunca se ha construido de una manera hermética, y el director, pese a haber nacido en Alemania y haber demostrado siempre una autoría muy poderosa nunca ha renunciado a rodar en el otro lado del charco. Pese a todo, su marca de autor ha hecho que sus películas americanas no sean grande producciones, sino que mantienen el tono independiente que caracteriza a Herzog. Aún así, seguramente Rescate al amanecer sea probablemente su obra más abierta al público general, no sólo porque esta vez ha contado con un reparto que cuenta con dos actores de nivel (aunque es cierto que cuando se rodó la película, el boom de Christian Bale aún no había implosionado del todo) sino también porque en varios momentos de la película, vemos señas de optimismo en el relato, incluyendo (especialmente) la eufórica explosión emocional que representa el final (un tour de forcé en todo su esplendor), señas optimistas que por otra parte, resultan una rara avis en la carrera del director.

Lo que está claro es que a Herzog no le interesa el aspecto bélico del conflicto, en el sentido tradicional del término. De hecho, las secuencias que podemos clasificar en ese género son mínimas y además está resuelta de manera poco ortodoxa. El choque entre la tropa aérea americana en la que se cuenta nuestro protagonista y el Vietcong se rueda en una escena que aparte de revelar el poco presupuesto con el que se contó para la elaboración de los F/X (Sólo hay que fijarse en cómo están reconstruidos virtualmente los aviones) demuestra que la pericia en tales lides no es precisamente la mejor en la que se desenvuelve el director.


Pero es que precisamente, a Herzog sólo le interesan los dramas personales. De hecho, en toda su trayectoria encontramos una constante, la captación de las pulsiones vitales del hombre. Unas pulsiones que hacen que este se eleve y trate de conseguir sus metas, pese a lo lejos que estas se estén. En muchas de sus películas los personajes no consiguen los objetivos que se proponen, cierto (como sucede en “Fitzcarraldo” o En Aguirre,” La cólera de Dios”) pero su afán por tal de conseguirlos no tiene límite.

Eso mismo es la esencia que podemos comprobar en rescate al amanecer. Al personaje de Christian Bale le cae la mala suerte encima cuando su aparato se estrella y se ve sólo en la inmensa jungla de Laos. Será encontrado por el Vietcong (no es que el Vietcong estuviera en Laos, pero la película sitúa la acción en una ubicación fronteriza) que lo encerrará como prisionero.

A partir de ahí, encontramos una de las constantes de la película, y la cámara se convertirá en el ojo clínico que tratará de mostrarnos los entresijos de la cárcel, así como las relaciones que establece con los demás personajes que comparten una suerte similar. Y la huida, evidentemente, será fundamental. Será la obsesión que dominará a Bale en todo momento. Será el motor fundamental que permitirá a Bale proseguir su existencia en todo segundo pese a las miles de dificultades con las que se encuentre. De hecho, una de las primeras frases que acompañan al protagonista no es precisamente que este haya sido capaz de sobrevivir al Vietcong, sino a la Jungla, que sin duda es harina de otro costal.

Tampoco le interesa a Herzog historias petulantes o pedantes, sino que minimiza la historia al máximo, y lo que ve precisamente el espectador son los detalles cotidianos que forman el día a día en una situación parecida. Y finalmente, llegamos a una explosión final de emociones, en la que el director se recrea con un final quizá atípico en la filmografía de Herzog, pero que conmoverá sin duda al espectador. Hemos de tener en cuenta que la historia está basada en hechos reales e interesó siempre al director que ya había rodado un documental sobre la figura de Diegler. El documental en cuestión se titula “ El pequeño Dieter Necesita volar”, y en él se nos cuenta las peripecias de este piloto nacido en Alemania, que emigró a Estados Unidos y posteriormente marchó al Vietnam.

La producción está bien cuidada, y eso se nota en todo momento. La impresión de que Bale está caminando por la selva asiática. Hasta la humedad de la jungla parecerse sentirse muy cercana.

http://neokunst.wordpress.com/2013/06/29/ciclo-werner-herzog-rescate-al-amanecer/