Quizás hayamos visto muchas películas de este tipo, caso complicado contra una multinacional o empresa potente y en el lado contrario, un pequeño bufete de abogados. Pero recuerden una cosa, estos hechos fueron reales y ocasionaron mucho daño.

La peli conecta muy rápido con el espectador, no hay nada que enganche más que la típica historia de David contra Goliath y aquí lo vemos a las claras en esa escena de unos pueblerinos que vienen acompañados de unas cintas de vídeo sobre su denuncia a favor del medio ambiente.

A partir de los siguientes minutos veremos como llega el momento de convicción de Rob, como se hace cargo y a raíz de ahí la cantidad de gente que se le vuelve encontrar y las puertas que se le cierran continuamente. Una situación complicada que el director inteligentemente sabe hacer llegar al espectador. ¿Cuándo se te pone todo en contra una y otra vez, es motivo suficiente para abandonar? Eso lo tendrán que descubrir ustedes mismos.

No se me ha hecho para nada largo y menos aún con el reparto tan especial. Lo de Mark Ruffalo es perfecta y que decir de su esposa Anne Hathaway sufriendo y apoyando en la sombra. Ojito al papel de los veteranos Tim Robbins y Bill Pullman.

Muy recomendable.