Una cosa que no tragué, trago, ni tragaré, es ver a un actor cachas ejerciendo de frikie panoli. No, no y no. No cuela y punto. Es muy complicado asociar una imagen definida y predeterminada a algo de un registro totalmente diferente, ya me ocurrió en su día con Arnold y también fue un auténtico desastre. Una cosa es hacer comedia, que se puede hacer y muy buena y otra es intentar ridiculizar al personaje. Lo siento pero no.

En lo referente a la historia me encantan este tipo de películas, en especial las que nos ubican en la juventud y especialmente en el instituto. Los que fuimos, sabemos perfectamente que en cada uno de ellos existen status, unos sobresalen, otros no destacan, otros pasan inadvertidos (en este me manejaba yo) y otros son el hazmerreir de todos. Y que agradable es encontrarse con el paso de los años con gente que estudió contigo y comprobar si sus auténticos sueños se han cumplido o no. Conozco casos extremadamente extraordinarios.

No imaginaba ni por asomo que la historia se inclinara hacia el cine de acción-comedia, y que apareciera la CIA por ahí, pero le ha dado un toque algo entretenido, porque de verdad que no sé hacia donde podría ir dirigido el guión de esta película. Lo mejor de ella sin dudas es la pareja protagonista, tanto Dwayne Johnson como Kevin Hart hacen un dúo fantástico y se ve el feeling que existe entre ellos. Os invito a presenciar el final de la película donde se ven las escenas fallidas.

Se deja un final abierto por una posible continuación. En mi opinión no la habrá, pero...