Algo empezó a oler mal, cuando una película con Superman de protagonista tiene más de 10 avances, todo parece indicar que hay un intento desesperado por vender el producto, en este caso Snyder es como un vendedor sin argumentos, que vende un producto x que prometía desarrollo, pasión y más instinto, curiosamente nada de eso aparece en el film, el resultado final es un holograma deslumbrante en efectos especiales y secuencias de acción, que carece de desarrollo argumental y desarrollo de personajes. Snyder no se ha detenido a nada, ha dado en exceso la acción que hizo falta Superman Returns, y en este punto es curioso como el Superman de Zack y Singer se encuentran en puntos opuestos, y ninguna funciona realmente. Tal vez el intermedio entre esos dos personajes sea el héroe que necesitamos, por lo menos en cine, porque el criterio de que el nuevo Superman de los comics es así, no es válido para copiarlo palmo a palmo en una producción de cine. Es extraño darse cuenta que detrás del guion del filme esta David Goyer, y Jonathan Nolan, pareciera que los dos fueron forzados a escribir según el estilo del director de turno, solo eso explicaría ese espectáculo “narrativo” a través de invasiones, explosiones, épicas peleas que recuerdan más el estilo de Michael Bay. Ahora destacando lo bueno, el apartado visual es soberbio, los efectos visuales sin duda empezaran a competir por los mejores del año junto a Star Trek Into the Darkness y posiblemente otros blockbusters mas que faltan por debutar, el sello Snyder destaca en ese apartado, dándonos un par de secuencias de lucha cuerpo a cuerpo llenas de emoción (al mejor estilo de Dragon Ball), aunque y a pesar del poderoso General Zod, Superman no pareció correr peligro nunca, falto tensión en esas secuencias, sobre Cavill como Superman, puedo decir que si el día de mañana dan otro filme sin el como Kal-El, no lo extrañaría, Shanon le da energía a su villano igual que la sexy Antje traue, sin embargo sus interpretaciones se pierden entre tanto estruendo y exageración sónica. En el mismo apartado Amy Adams intenta funcionar como Lane, y a pesar de carisma, la relación Lane/Superman es tan apasionante como lo es todo lo demás. The Man of Steel está lejos de la película del 78, le falta gracia, le falta corazón a los músculos y más relleno a la tormenta destructiva propuesta, los fans del héroe de capa roja pueden estar muy emocionados, y entiendo por qué, pero un cinéfilo entenderá que detrás la sorprendente pantalla visual del filme hay un hueco argumental falto de esencia y emoción.

Lo bueno
El apartado visual no permite ninguna queja, las secuencias de acción y batalla nos hace recordar Matrix pero más perfeccionado.
Me gusto Constner como Jonathan Kent el único personaje humano que resulta valeroso.
El soundtrack de Zimmer se las trae, lástima que el escandalo pavoroso del filme no lo deja fluir bien.

Lo Malo
Pobre desarrollo argumental y desarrollo de personajes, la primera hora es un collage de cortos sobre la infancia y adolescencia de Kent, muy poco emotivos de paso.
El metraje para lo que se cuenta es demasiado exagerado.
Snyder no da con el sentimiento del personaje, se va a lo físico, al impacto visual…lo literal es casi inexistente.