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Voto de alessandro:
8
Intriga. Fantástico. Terror En el Madrid castizo de finales del siglo XIX, el enigmático fantasma del doctor Mantua revela al joven Basilio la existencia de una ciudad subterránea en la que habitan unos siniestros personajes dedicados a actividades criminales. Basilio consigue dar con la Torre de Los Siete Jorobados, en cuyo interior permanece secuestrada e hipnotizada Inés, la sobrina del difunto doctor... (FILMAFFINITY)
3 de enero de 2016
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película es una rareza, ya que es un título antiguo y español. Una producción del año 1944, desconocidísima para el gran público.


Lo insólito de la propuesta, de este cine de posguerra español, es que a veces deja en evidencia a la presunta modernidad de obras vanguardistas que se cocinan hoy en día en la gran pantalla.
El director de esta "rara avis" es Edgar Neville(1899-1961), nacido el mismo año que lo hiciera Alfred Hitchcok.
Neville fue esencialmente un personaje individualista, singular, contradictorio. Pero sin embargo en su cine, ha sabido desprenderse de ese corsé moralista y rancio que impregnaba la época.
A su manera Edgar Neville representaba esa estirpe de cineastas de cine de autor, encuadrado en una serie de contribuciones artísticas multidisciplinares; escribió diez novelas, realizó y firmó 11 textos teatrales, y filmó una veintena de producciones. Además de otros cometidos (tertulias, revistas sastíricas), en fin como diriamos aquí "un puto crack".
Muy amigo también de los literatos Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura.


La torre de los siete jorobados es su única incursión en el género fantástico, aprovechando ese efecto que se produjo en los años 30 y 40 en distintas cinematografías ubicadas al sur de Europa bajo el influjo del expresionismo aleman, y a traves de la literatura con mucha influencia de lo gótico.
Edgar Neville aprovechó su puesto de Embajador en Washington, ya que provenía de un linaje aristocrático (Conde de Berlanga Del Duero) por vía materna, para así dejar crecer su filiación en arte cinematográfico de la mano de sus primeros colonizadores (Douglas Fairbanks, Charles Chaplin, Mary Pickford).
Neville residiría en la meca del cine, desde 1928 a 1931, tiempo necesario para aclimatar las ténicas adquiridas. Hizo varios cortos documentales sobre la Guerra Civil.


La torre de los siete jorobados es la pieza angular del cine de Edgar Neville. Conservandose en todo momento intacta, por eso es la primera película de terror, de misterio que se realizará en España. La sola ídea de plantearse o adaptar un film sobre la base de conceptos sobrenaturales, representaba una garantía de no pasar el corte para los órganos censores...
Él film está rodado en su totalidad en Madrid.
La película es un universo compuesto de distintas realidades paralelas, que parecen convivír una al lado de la otra, influenciada eso sí, por el expresionismo aleman, con un blanco y negro que inflinge al espectador un cierto sentido de fábula presidida por universos paralelos; la superchería, la picaresca, la doble moral de las sociedades regladas sobre conceptos oscurantistas, ligados a una tradición religiosa.


La torre de los siete jorobados, se ayuda de unos decorados, que nos provocan esas imágenes cautivadoras, que asociamos a las escaleras en espiral, que nos conducen a un territorio apto para necrófacos.
Por su caracter de pieza insólita, la torre de los siete jorobados debería formar parte del imaginario del aficionado al cine fantástico con las ventanas abiertas de par en par, para dejarse atrapar por su brisa lejana...tan lejana como los tiemps de una postguerra poblada de espectros.
alessandro
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