Es totalmente inconcebible que alguien vea esta película y se quede tan pancho. El abanico de reacciones es tan amplio como el de seres humanos que la hayan descubierto: vomitar, suicidarse, partirse la caja, hacerse monje franciscano, quedarse con los ojos abiertos de par en par seis días seguidos, desmayarse o poner cara de asco los 90 minutos que dura. Pero desde luego el quedarse indiferente no está incluida en ese espectro.

Esta maravillosa abominación es tan singular, tan sin parangón, tan jodidamente frikísima, que ponerle una puntuación comprendida entre el 2 y el 9 sería una injusticia moral. O bien es una santa mierda muy por debajo del mínimo 1 que 'filmaffinity' nos permite otorgar, o por el contrario una obra maestra adelantada siglos (o puede que milenios) a nuestro tiempo que la mayoría de las mentes que la han sufrido/disfrutado no son capaces de comprender aún, y sí cuando nuestro cerebro haya evolucionado a un estadio superior. Yo personalmente abogo por la segunda hipótesis, dando por hecho que es imposible que las personas implicadas en el proyecto pretendieran hacer algo en serio... y por supuesto aceptando el sumirme en la más descorazonadora de las depresiones si algún día llego a concluir que efectivamente, este TURKISH STAR WARS quería realmente ganarse un hueco en la categoría de 'Cine', provocando que yo abandone toda esperanza en la especie humana.

No amigos, esto no es cine, no. Dista mucho de parecérsele. Pero quién soy yo para afirmar con seguridad que algún día puede que sí llegue a serlo. Quién soy yo, miserable mortal, para atreverme a asegurar que dentro de x tiempo las generaciones venideras tendrán esta cinta como su guía espiritual, como su código filosófico y existencial, como su Sagrada Biblia. Jamás lo sabré. Lo que sí sé es que me considero muy afortunado de haberla visto. Y considero un deber personal el difundir su mensaje, verla con mis amigos, anotar sus reacciones, puede que incluso grabar sus caras de perplejidad... y por supuesto, tratar de imitarla. Aunque llegar a conseguirlo está fuera de mi alcance, soy consciente.