Los Dos Papas deja un buen sabor de boca. Tiene sus momentos tiernos, solemnes, dramáticos, cómicos. Todo esta perfectamente dosificado cual mecanismo de relojería. Visualmente es elegante, con buen ritmo y al final, una conversación de 2 horas entre dos personajes tan alejados del mundo del espectador, se ve con agrado.

El problema es la falta de valentía para ahondar en los temas espinosos. La antena moral que todos llevamos conectada, aunque sea inconscientemente, me hace desconfiar de un film de Netflix que blanquea unos personajes, seguramente con más oscuros, que claros.

Eso no quita para que sea una muy buena película, con un guión muy inteligente y una dirección exquisita. Mención aparte del duelo interpretativo entre Pryce y Hopkins. El trabajo de ambos es admirable, espectacular. Disfrutar de sus interpretaciones ya justifica el visionado del film. Mi duda es: estamos ante una joya, una obra de orfebrería o ante fuegos artificiales made in Netfix?