Las películas de “los compadres” son como todo el género de comedia, nacional o extranjera. Quiero decir, que te gustarán más o menos, en función de la gracia que te haga su particular sentido del humor.
La película empieza bien, planteando un encuentro internacional de negocios en la finca del suegro del protagonista, con todas las señas de identidad de la pareja cómica.
Sin embargo, aunque tiene momentos bastante buenos y muy divertidos, en general me ha parecido la película más floja que han hecho hasta ahora.
En “El mundo es suyo” no paraban de pasar cosas, el enredo era tremendo y los “cameos” de gente como la reportera o los chirigoteros de Cádiz se sucedían sin dar un respiro.
Aquí todo sucede en la finca (prácticamente no hay más escenarios), la química entre Fali y Rafi es un poco distinta (empiezan totalmente peleados), no hay tantas apariciones divertidas de secundarios, y sencillamente, no me ha hecho reír tanto.
Eso sí, hay que aplaudirles el hacer una película que se pasa por el forro la dichosa corrección política actual. Aquí se ríen sin tapujos de la izquierda, de la derecha, de los “sociatas”, de los “fachas”, y de España en general. Pero se centran tanto en la parodia y en la crítica social, que el humor ya no funciona tan bien. Además, esto le pesará con el paso de los años, cuando ya no estén tan de moda todas las referencias que utilizan para los chistes.
Con todo, es una película bastante divertida, sobre todo en su primera mitad. Llegando a la parte en la que se emborrachan y tienen visiones, todo coge un cariz aún más absurdo si cabe, y ya no remonta hasta el loco final, que termina siendo bastante surrealista aunque también con momentos geniales que la salvan.
No es que no me guste, pero sus otras películas me han parecido superiores en todo.